Sur de Esparragalejo

Se localiza en el extremo sur de la localidad, en una parcela con terrenos incultos y contigua a la carretera de Montijo-Mérida, EX-209, por su lado norte.

En esta fosa se encuentran los restos de Pablo Díaz Concepción, natural de Esparragalejo, pero residente en Montijo tras casarse con la montijana Anselma Rodas Piñero. En el 2010, su hija Carmen Díaz se pone en contacto con la ARMHEX para la búsqueda y localización de sus restos. A través de la ARMHEX llega hasta el PREMHEX toda la documentación sobre este represaliado para iniciar las labores de búsqueda y localización. Según la información apartada por su hija, Pablo Díaz permaneció en Montijo tras el golpe de Estado ya que, según cuenta su padre, estaba convencido de que nada malo podía sucederle pues según él no había motivos para ello; días después de la toma fue detenido por “gente del pueblo”. Carmen no conoce a ninguno de los que detuvieron a su padre ya que su madre siempre guardó silencio. Según los familiares, se lo llevaron a Esparragalejo, donde estuvo encerrado en una “especie de pajar”, de donde fue sacado y posteriormente fusilado. La localización de la fosa se sabe gracias al testimonio del abuelo de Carmen, suegro de Pablo Díaz que le contó a su nieta todo lo que sabía sobre los hechos de su muerte. Según su testimonio, cuando se entera de la detención de su yerno intenta mediar por él pidiendo ayuda a dos empresarios para los que trabajaba con el fin de salvarle la vida. Tras su muerte, gente del pueblo va a casa del hermano de Pablo que vivía en Esparragalejo y le dicen que le han matado y que su cuerpo está al descubierto. Esa misma noche se dirige al lugar y él mismo con una pala le entierra al lado de una piedra para no ser pisoteado y cerca de la carretera. En el 2019, llega al PREMHEX a través de la ARMHEX una solicitud de reactivación de la búsqueda de los restos de Pablo Díaz. En el 2020 se tenía previsto llevar a cabo las actuaciones pertinentes e iniciar la búsqueda. Esta actuación fue pospuesta por la crisis sanitaria generada por el COVID-19 quedando aplazada para más adelante.

La toma de Mérida trajo como consecuencia la caída de los pueblos de su entorno como fue el caso de Esparragalejo, ocupado por una sección de Regulares al mando del capitán Gabriel Fuentes Ferrer el 12 de agosto del 1936. La represión franquista no comenzó hasta principios de septiembre y todas las muertes fueron por fusilamientos de forma extrajudicial. La cifra total de muertes mediante esta práctica fue de 12 personas en total, todas inscritas en el Registro Civil de Mérida o Esparragalejo como fallecidos por “choque con la fuerza pública” o “causas relacionadas con la guerra”. Todos estos fusilamientos tienen lugar en septiembre, a excepción de dos de ellos, uno en 1937 y otro en 1938 en Badajoz.

"Informe solicitud de búsqueda y localización de fosa común en Esparragalejo". Documento elaborado por el PREMHEx.

ESPINOSA MAESTRE, F. La Columna de la Muerte. El avance del ejército franquista de Sevilla a Badajoz. Editorial Crítica, Barcelona, 2003.
MARTÍN BASTOS, J. Badajoz: Tierra quemada. Muertes a causa de la represión franquista 1936-1950. PREMHEx, Badajoz, 2015.